Cómo te debes de vestir en la fiesta de Navidad de tu oficina y parecer que realmente quieres estar ahi

La mayoría de las fiestas de Navidad en la oficina son como “los últimos días de Roma”. Si a eso le añadimos la fiebre del trabajo a tiempo completo y un departamento de operaciones enloquecido que aprovecha al máximo la barra libre, la fiesta se convierte en una auténtica Pompeya. Pero eso no significa que tu traje para la fiesta de Navidad del trabajo tenga que ser como si fuera tu noche favorita del año. Sólo tienes que vestir bien: poco esfuerzo, mucho rendimiento.

Es más fácil decirlo que hacerlo. Tampoco hay una respuesta fija para dar en el clavo con el atuendo de la fiesta de Navidad del trabajo.  ¿Llevas un cordón y dices términos financieros con una ligera amenaza como si estuvieras en Industria? ¿Trabajas en una oficina donde los pufs y las latas calientes de cerveza de los viernes se consideran una ventaja? ¿Te presentas una vez a la semana y sólo hablas dos palabras con tus compañeros? No todos los lugares de trabajo y sus fiestas son iguales.

Pero para que tengas una idea aproximada de cómo vestirte para la fiesta de Navidad de la oficina, que está a la vuelta de la esquina (algunas empresas incluso celebran las suyas en noviembre), hemos esculpido algunos conjuntos que son fáciles y eficaces sin que parezca que te has esforzado demasiado.

Ideas de conjuntos para la fiesta de Navidad del trabajo:

• La fiesta de la oficina, en la oficina

Los accionistas quieren que te diviertas. Pero no demasiado. Así que este año, gruñón, RRHH tiene el placer de anunciarte que todo tu duro trabajo en la oficina será agradecido con unas copas… en la oficina.

La clave está en saber leer el ambiente. Si, en el día a día, tú y tus colegas se comienzan a esforzar muy poco en el aspecto, más allá de llevar un traje de trabajo normal, entonces querrás que tu traje de fiesta sea sencillo. Opta por una versión elevada del conjunto que llevas a diario. Si su traje es azul, lleva camisa blanca y a veces corbata, opte por un traje a medida, con mocasines y sin corbata. Es un pequeño cambio que tendrá un gran impacto, sobre todo porque el traje se ajustará bien a tu cuerpo y siempre hay un susurro de “¿lo dejamos y nos vamos al pub con gente que nos cae bien?

• La cena sentada de cuatro platos

Si tu oficina invierte dinero en la fiesta de Navidad y organizas una gran comida o cena con los clientes presentes, tienes que esforzarte un poco. Tu trabajo está en juego.

La clave está en jugar con los tejidos y animar las prendas que llevas a diario. Eso no significa que tengas que ir como si estuvieras en la sala de fumadores de primera clase del Titanic. Pero sí significa que puedes optar por colores más vivos, un traje de salón louche y quizá un gran abrigo largo que te haga sentir importante y Wall Street de los 90, o un hotelero de una película de Wes Anderson.

• La fiesta en un pub después del trabajo

Si te vas a tomar unas copas después del trabajo, no tienes que preocuparte demasiado por tu atuendo. La mejor forma de pensar es vestirse de forma lateral. Apuesta por las prendas de punto. Usa ropa de calle. Ponte un par de zapatillas limpias que dejen claro a tus colegas que en realidad eres bastante cool más allá de esas cuatro paredes.