El poder del tiempo: los nuevos relojes de MIDO que fusionan técnica y tradición

La vanguardia y precisión de MIDO se expanden hacia nuevos cambios técnicos que vuelven a poner a la marca en el centro de la alta relojería. Entre diseños potentes y funcionales, la firma impulsa una eficiencia mecánica con el nuevo Multifort TV Chronograph y el Commander Gradient Catrines, dedicado al Día de Muertos. Dos modelos excepcionales que no solo honran el carácter único de MIDO, sino también inspiran con su utilitaria elegancia perfecta para el día a día. 

Multifort TV Chronograph

La silueta de TV ha consolidado este reloj como una pieza codiciable gracias a diseño retro marcado por contrastes metálicos: del gris claro al negro profundo con destellos amarillos; de los acabados satinados a superficies altamente pulidas.

“Instantáneamente reconocible”, su corazón late con el Calibre 60, protegido por una caja de 42 mm. Su brillo metálico enmarca una carátula con un degradado de gris a negro, realzada por tres acumuladores del cronógrafo —60 segundos, 30 minutos y 12 horas— y una discreta ventana de fecha ubicada entre las 4 y las 5.

El suave degradado potencia el pulido del acero robusto con un cepillado horizontal.  Los índices hundidos, recubiertos con Super-LumiNova blanca, junto con las manecillas de horas y minutos, garantizan una lectura perfecta incluso en la oscuridad.

Su formidable precisión se debe al espiral Nivachron, resistente a golpes, campos magnéticos y variaciones de temperatura.

Commander Gradient Catrines

Inspirado en el Catrín, esta pieza rinde homenaje a la identidad cultural mexicana. Es un reloj excepcional “reservado durante mucho tiempo para uno de sus mercados más antiguos e importantes: México”.

El icónico esqueleto danzarín es adornado con una explosión de colores que enaltecen la autenticidad y el orgullo cultural. La creatividad se refleja en una carátula degradada que transita de la oscuridad a la luz: una metáfora visual de la continuidad del tiempo.

Para esta edición especial, la pieza luce una pintura igual de| impactante: el Catrín, colorido y alegre, creado con nada menos que diez lacas—una combinación sagrada de de la maestría relojera suiza y las tradiciones mexicanas con juego de colores y luminiscencia también se aprecia en los índices pulidos —con una ranura central rellena de púrpura, amarillo, azul oscuro o turques. 

“Un testimonio de resiliencia, presencia y herencia cultural, desafiando al tiempo con sus alegres colores fosforescentes”.