La nueva colección de Prada: Possible Feelings, marca la introducción de Raf Simons a la línea masculina de la marca italiana y es la segunda ocasión que podemos ver el gran equipo que ha hecho a lado de Miuccia Prada.
En un set diseñado por Rem Koolhas y AMO, los espacios del desfile estuvieron compuestos con materiales como paneles de mármol, resina, yeso y piel sintética, que unido a la ropa, lograron sintetizar el concepto detrás de la colección: “el deseo íntimo y personal del contacto, el impulso de intercambiar y relacionarse”, creando lugares que invitan a la libertad de expresión e interpretación.

Foto: Cortesía Prada
La colección logra crear una conversación entre Simons y Prada, plasmando el trabajo que ya conocemos de ambos e inventando uno nuevo compuesto por los colores clásicos de la firma italiana, que van desde el verde menta hasta el rosa pastel; estampados geométricos y el perfecto manejo de la sastrería que Simons ha mostrado en Jil Sander y Calvin Klein.

Foto: Cortesía Prada
Los accesorios presentados en la colección como bolsas moradas, guantes amarillos y zapatos con plataformas muy anchas, hacen eco con los trajes, los pantalones y bodysuits, las bomber jackets extra grandes encima de polos y suéteres en “V”, creando muchas capas en cada look y conceptualizando la idea del tacto de la colección acentuada con telas como: lana, re-nylon y tweed.

Foto: Cortesía Prada
En medio de una pandemia global, la necesidad de los diseñadores por volver al contacto físico con otras personas, hace eco al deseo que muchos que sentimos. Así, el resultado no sólo ha creado una colección que recordaremos durante mucho tiempo, sino también, marca la introducción del nuevo capítulo de Raf Simons en Prada y continúa la creación de la historia de la moda con uno de los grandes diseñadores de moda masculina.
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