En las áreas creativas profesionales, saber lo que está ocurriendo en el momento, es parte importante para construir ideas o conceptos, basados en propósitos y públicos específicos. Así, el Coolhunting o “cazar tendencias” es una importante herramienta de investigación del mercado, dedicada a la observación de futuras tendencias y estilos emergentes.
Por su parte, el coolhunter, es aquel analista de tendencias, hábil para identificar señales de cambio para luego comunicarlas de manera clara, efectiva y accionable, aplicándolas a distintas estrategias creativas.
El cazador de tendencias surge de la necesidad empresaria de conocer qué quiere el consumidor, qué busca, cómo se puede atraer y cuáles son sus intereses.
De acuerdo con el blog de IEBS: El Coolhunting es el procedimiento de investigación de tendencias, que intenta captar las señales de estos elementos “cool” cuando empiezan a vislumbrarse, con el objetivo de ayudar a las empresas y a los profesionales a adaptarse a las mismas y poder ser más competitivos e innovar en el mercado.
Además, señala que parte de este proceso de investigación es conectar el lifestyle, por lo que es necesario la rapidez para adaptar la tendencia en la primera fase, pues es bien sabido que las modas son pasajeras y solo así se podrá rentabilizar al máximo.
Los cazadores de tendencias se encuentran en áreas como la arquitectura, la tecnología, cosméticos, markeing y diseño. En el caso de la moda, es uno de los más grandes sectores para los profesionales de este ámbito.
De esta manera, en la industria de la moda, el Coolhunter debe adelantarse a su competencia y llevar a la marca a lanzar productos como, determinadas prendas, ya sea un pantalón o una camisa, con los colores que previamente estudió y muy probablemente serán tendencia.
De acuerdo con OCCAM agencia digital, en el sector de la moda lo que buscan es entender lo que las personas comunican con su ropa, qué sentido tiene para ellos y cuáles son las necesidades dejadas de lado por la moda actual. Por ejemplo, un Coolhunter de moda sería capaz de analizar por qué triunfan los pantalones campana o los pantalones de tiro alto; o por qué se llevan los vestidos con volantes y no con lentejuelas.
Normalmente, son personas con formación académica en el mundo de la moda, la comunicación, el periodismo o la fotografía, pero a veces también hay personas que se convierten en trendsetters (creador de tendencias) a través de los seguidores que tienen en prensa o en redes sociales.
Con la llegada del Internet, los influencers y de manera reciente, la pandemia, la digitalización de la industria de la moda modificó la dinámica de los Coolhunters que antes asistían a las pasarelas de los diseñadores más importantes para analizar y captar las nuevas tendencias.
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En la actualidad, el Coolhunting es una herramienta útil, que como muchas otras, ha tenido que modificarse gracias al crecimiento del uso de las redes sociales, mismas que han expandido sus herramientas de búsqueda, dándoles un mayor espectro de vanguardia que no necesariamente ocurra sobre una pasarela.
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