En algún punto de nuestra vida llega el momento donde tenemos que tomar la decisión de avanzar en nuestros objetivos para comenzar a independizarnos: de afrontar una nueva realidad y soltarnos de la dependencia para poder adquirir nuestras propias cosas. Ahorrar no es una tarea fácil y más cuando se habla de cantidades grandes como el presupuesto de una casa, incluso en ocasiones nos podría aterrar la misma incertidumbre del futuro. Puede ser que comprar una casa sea el sueño de varios. Sin embargo igual es un gran reto que se debe pensar con bastante detenimiento.
¿Pero qué pasa si apenas estamos comenzando en el mundo laboral? ¿Cuáles son las adversidades con las que me puedo enfrentar? Evidentemente cada individuo o persona ajusta sus métodos de ahorro a las circunstancias propias, tanto laborales como personales. Como jóvenes podemos tener ambiciones, sin embargo, en el horizonte aparecen algunos desafíos que limitan este objetivo. Por ello hablamos con Humberto Arroyo, CEO de Mexihom, para poder detallar más del desarrollo inmobiliario residencial.
Ahorra un porcentaje de tu sueldo
Un primer factor que tenemos que tener en cuenta es que la mayoría comienza a soltar poco a poco su anterior forma de vivir para adentrarse en el mundo laboral. Nuestro primer paso es cuando dejamos la casa de nuestros padres esperando que en el futuro logremos sostener un ingreso favorable para poder tomar la responsabilidad de adquirir una casa.
“Existe una idea respecto a los individuos que forman parte de la generación millennial: que no pueden acceder a las facilidades en términos monetarios de las que gozaron sus padres y abuelos, incluyendo a aquellas relacionadas a la adquisición de un inmueble”.
Por ello, nuestra base principal será el trabajo en el que estemos, ya que este nos permitirá abrirnos a diferentes opciones, además de generar los ingresos que necesitemos
Enfócate en tu objetivo de acuerdo a tu trabajo
Ahora, cuando hablamos de ahorrar para adquirir una primera propiedad, la mayoría se equilibra por la opción crediticia, es decir, pedir un crédito inmobiliario tanto a un banco o a una institución como el Infonavit. Tenemos que recordar que gran parte de las instituciones bancarias y otras afines solicitan o requieren un historial crediticio por parte del comprador, algunas de éstas son más permisivas en cuanto al otorgamiento de ciertos créditos, dependiendo de factores esenciales, como el laboral.
“Es importante recordar que debe existir una correspondencia clara entre nuestro sueldo y los montos mensuales del crédito que estaremos pagando.”
En ocasiones, el aspecto principal del ahorro dependerá del enganche, es decir, un porcentaje considerable del precio total de la vivienda. Ese sería el primer reto; estar sujeto a disponibilidad para poder hacer este primer gasto. El resto del pago podrá depender de un crédito que iremos costeando según la temporalidad que elijamos.
“Lo mejor es establecer un cálculo sencillo entre nuestro sueldo y el porcentaje del mismo que irá destinado a este crédito. Si éste último sobrepasa el 40 por ciento de nuestro salario, quizás esta deuda comience a absorber más de lo recomendado.”
Recorta gastos innecesarios y consigue ingresos extra
Tenemos que recordar que estaremos adentrándonos en un gasto constante, por lo que igual deberemos de recortar algunos gastos que no son prioridad. Establecer al mes en que gastamos más nuestro dinero para poder lograr un equilibrio. También podemos optar por buscar una manera extra de conseguir ingresos: emprender en algún proyecto puede ser también una forma de conseguir beneficios y una estabilidad económica a mediano o largo plazo que permite acceder a la compra de un inmueble.
“Algunas iniciativas individuales cargadas de creatividad e ímpetu pueden conducirnos a adquirir nuestra primera casa, más allá de los condicionamientos y circunstancias propias de cada situación”.
No dudes en pedir asesoría
Existen diferentes formas de informarnos más al momento de planear adquirir una casa, una de ellas sería buscar distintos esquemas de pago al momento de iniciar la preventa de un desarrollo para revisar mejor nuestras opciones.
“En Mexihom ofrecemos asesorías y ciertas guías sobre qué tipo de préstamos pueden funcionar para cada tipo de perfil de cliente. Además de que aceptamos créditos bancarios, Infonavit o Cofinavit. Asimismo, se ofrece el apoyo de brokers inmobiliarios que asesoran y tramitan créditos para los clientes, buscando así apelar a un diseño arquitectónico de espacios que refleje ambientes cálidos y plenos para vivir”.
Aunque los pronósticos para obtener un desarrollo inmobiliario sean desafiantes, planear nuestros objetivos con precisión y consciencia puede ser una forma efectiva de lograrlo. Ahorrar para comprar una casa requiere de mucho esfuerzo y tiempo, así que debemos estar siempre enfocados en nuestro objetivo, mantenernos motivados y recordar que la constancia puede ser nuestra mejor ayuda.
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