Seguro, en más de una ocasión, te has preguntado como eliminar los restos de suciedad que logran acumularse en tu reloj con el paso de los días y, peor aún, has batallado -con mil objetos- en tratar de quitar los horribles “grumos” que tienden a formarse entre la caja y las hendiduras del reloj.
El sudor, la corrosión causada por efectos del aire y la contaminación; incluso el salitre de las zonas costeras afecta de manera paulatina, pero constante, la efectividad y el desgaste en los materiales de este accesorio. Aunque el acero inoxidable es un material resistente que no tiende a rayarse, la acumulación de suciedad en la parte exterior hace que el reloj pierda el brillo original.
Los restos pueden juntarse en grietas difíciles de alcanzar como en los biseles, detalles en las pulseras que causan una mala impresión, por suerte, todo esto puede solucionarse con estos fáciles consejos.
LIMPIEZA DIARIA
El cuidado diario del reloj es de vital importancia para mantener su brillo intacto. Al final del día y como parte de la rutina, intenta agregar el hábito y frota, con un paño para gafas, toda la estructura del reloj.
JABÓN NEUTRO LÍQUIDO
Lo que el paño en ocasiones no puede remover es solucionado por el jabón líquido. Con tan solo una gota y un cepillo de dientes de cerdas delicadas, talla ligeramente la pulsera. Al final, seca con un paño pues, el jabón, habrá terminado con la grasa.
LIMPIADOR PARA VIDRIOS
Puedes usar de este producto sobre un paño de lana y frotar todos detalles del reloj. Talla sobre las hendiduras y, cuando el paño esté casi seco, pasa rápido y sin presión sobre la cara del reloj.