Salvatore Ferragamo presentó su más reciente colección para Otoño / Invierto 2022 en la neoclásica Sala delle Cariatidi o Palazzo Reale en el corazón de la Piazza Duomo de Milán.
Con este escenario envolvente, inspirado en la escultura de obras de arte ligeras, la marca presentó su nueva colección de accesorios para hombres y mujeres prêt-a-porter. Debido a la falta de un desfile presencial, se realizó un showroom presencial para editores y personalidades, los cuales apreciaron los accesorios a través de círculos de colores y pasajes de luces.
Durante la presentación, se pudo apreciar la colección en islas de coloridos cubos de plexiglás con efectos de luz brillante, que contrastaron artísticamente con la belleza del lugar. Al final del camino, el video de la colección llevó a la audiencia a interactuar con los límites de la percepción del ojo.
La colección estuvo encaminada a un estilo casual, influenciada por los acontecimientos mundiales y los nuevos valores generacionales que han cambiado los hábitos, impulsando el declive de la sastrería y la ropa de noche a favor de un mayor enfoque “informal”.
De esta manera, Ferragamo se pronuncia a favor de este cambio bajo su propio enfoque: Una colección construida para demostrar que la ropa, categorizada como “casual”, se puede hacer, elegir y usar con tanto cuidado, discernimiento, artesanía e ironía como cualquier vestido de noche o esmoquin.
Así, Ferragamo deconstruye los códigos de lo “casual” para luego reconstruirlos en un espíritu de precisión liberada y expresión fluida; características compartidas entre los géneros.
Para la colección masculina, se conserva la línea formal, cuya complejidad se reduce en chaquetas de construcción suave y chalecos insertados. Así, podemos ver el icónico Gancini en aplicaciones acolchadas; piezas como parkas, jerseys y sudaderas en nylon sustentable, integrando los códigos de Ferragamo en la sustancia material de prendas técnicas.
Hay que recordar, que ambos géneros comparten el athleisure, mejorando en pantalones de lana de pelo de camello, chaquetas de punto y suéteres entregados con detalles artesanales. Así, los dos se permiten un juego irónico enfocado en la escala y la proporción, en la que el rayado exagerado y el parcheo se combinan para reemplazar la “elegancia” de la formalidad con la ironía y la inteligencia de la “informalidad”. Estos enfoques dotan de actitudes frescas con un carácter contemporáneo.
Respecto a los zapatos, los nuevos estilos de “running retro unisex” llegan con una suela de “arcoiris” que hace referencia al icónico zapato “Rainbow 1938” de Salvatore Ferragamo. Por su parte, las botas para la nieve, los mocasines y los excursionistas, cuentan con suelas ultraligeras y proporciones sutilmente volumizadas en piel de becerro ricamente táctil. El icónico hardware de Gancini se aplica a estos y a una nueva bota de combate, colocada para un efecto irónico y sorprendente.
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