Nunca subestimes el poder de los calcetines blancos

El uso de calcetines blancos se ha postergado y heredado en varias generaciones, haciendo su uso, como una obligación y parte de la vestimenta humana. Desde niños, somos impuestos al uso del blanco y en repetidas ocasiones la uniformidad escolar que solemos acatar, recalca que su simplicidad colorida, es nula ante los cambios de madurez en la estética a la que nos arropamos, al convertirnos en adultos. Tendemos a usarlos, pero ocultando su lucidez bajo unos pantalones o los atléticos uniformes que portamos en el gimnasio.

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En una época que impera una mayor libertad a la apariencia exterior, la nostalgia se convierte en un acogedor atuendo, que emana un gusto por otorgar popularidad a lo rechazado. El uso de boxy mini shorts o slutty shorts, ha regocijado a cientos por aniquilar la incomodidad del sudor y elevar la demostración de piernas fornidas y claramente, disponer de elementos básicos que adecuen la prominencia de tu outfit. Paul Mescal, es el máximo ejemplo de cómo unos calcetines blancos y mocasines, le añade genialidad a los pavorosos tiempos; involucrando una mayor atracción a unos básicos de tu closet y siendo sexy con un toque de informalidad.

No es algo que debas usar en la niñez, implica modernizar aquella etapa llena de inocencia y simplicidad. Unos clásicos calcetines blancos, mejorarán cualquier propuesta que tengas en mente. No limites tu perspectiva y sigue el ejemplo de algunos It Boys que añoran tal prenda. No disminuyas su proporción abajo de la muñeca de la pierna, extiende y extiende, a la Jorge Patiño (otro imponente ejemplo).