Y el ganador del color del año 2026 de Pantone ES…Cloud Dancer

Inesperadamente, la paz y armonía formarán parte integral de nuestro closet. Pantone––la institución que desde 1999 se encarga de seleccionar el color que dominará cada año––ha escogido a “Cloud Dancer” como el tono del 2026. 

Conscientes de que vivimos en una época de transición, sobreestimulados por la globalización, este elegante nombre para el blanco promete ser un respiro: una hoja en blanco para volver a empezar. A diferencia del Mocha Mousse, es más suave como etéreo, su confort minimalista es un alivio visual como … ¡Lux de Rosalía! o la bata de un doctor.

Cloud Dancer––también conocido como Pantone 11-4201–– evoca un deseo de satisfacción y armonía, un deseo por un futuro libre de toxicidad y excesos, y más cargado de neutralidad, serenidad y cohesión. Dado el clima político y cultural actual, este color es una declaración audaz en medio de tanto simbolismo que perturba la inocencia del arcoiris.

La belleza honesta y sin filtros, conecta perfectamente con nuestro entorno. El blanco se encuentra en todo lo que nos rodea: un clásico que nunca pasa de moda y un imprescindible en cualquier armario (seguramente el minimalismo continuará prevaleciendo como una tendencia fuerte en las colecciones venideras, dejando atrás tanta intensidad cromática). Una base perfecta y sólida para el resto de colores.

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Ajustándose al calamitoso ritmo de vida que llevamos y abriendo espacio a nuevas oportunidades, la pureza de este color no perturba y reconforta nuestra sensibilidad… justo lo que necesitamos. Al fin y al cabo, siempre ha estado ahí: un básico que jamás nos traiciona y combina con todo. No envejece ni caduca, es esencial para la supervivencia humana … incluso lo relacionamos con la purificación del espíritu contemplando con aire soñador un cielo nublado “que nos desconecta y aleja” de las exigencias incesantes de la vida diaria para rejuvenecer profundamente a nivel mental, físico y emocional.

Tal vez algunos lo encuentren aburrido o elitista, pero es innegable que Cloud Dancer no es un tono pesimista, ni mucho menos vacío.