Hace algunos años, la fotógrafa Karla Lisker (gran amiga, fotógrafa de historias en BADHOMBRE) me invitó a la premier de la película Mientras el lobo no está, producida por su esposo Abe Rosenberg. El protagonista, un niño que parecía de 10 años, me causó especial gracia porque hablaba como si fuera un pequeño adulto, como esos niños que van a programas de televisión a contestar preguntas con más lógica y elocuencia de la que tengo yo. Ese niño era Luis de la Rosa, y yo nunca pensé que tres años después se habría convertido en una de las estrellas juveniles más populares de México. Sus papeles como Luis Miguel en Luis Miguel La Serie y Bruno en La Casa de las Flores (y sus películas Todas las pecas del mundo y Un Papá Pirata) han hecho que el panorama del entretenimiento mexicano de nuestra época no sea el mismo sin él…
…lo cual es muy sorprendente, porque tiene solo 17 años.
Gracias a su trabajo, su visión es muy madura a pesar de su edad. “Manolo Caro está totalmente en contra del estereotipo de un hombre masculino, sino se acerca a los sentimientos, a estar cerca y ayudar a tu familia y a tus amigos, a trabajar por los demás.”
Esta madurez le ayudará a atravesar la situación actual, en la cual terminará la preparatoria sin ceremonia de graduación (lo cual también le pasó, hace 10 años, a su tío ficticio Dario Yazbek por la pandemia del H1N1) y a hacer sus exámenes finales a distancia. Como en la mayoría de las industrias, los nuevos negocios están detenidos, pero seguramente a finales de año Luis volverá a ser uno de los actores más buscados para protagonizar proyectos. Nunca se sabe, quizás este joven se vuelva tan grande como su personaje Luis Miguel.
Ve la entrevista a los protagonistas de La Casa de las Flores – incluyendo a Luis de la Rosa – en el siguiente video:
En esta historia: Luis de la Rosa fotografiado a distancia con un iPhone 11. Styling: Nayeli de Alba. Edición digital: Francelia Bahena, Yoshua Gitlin y José Toscano, usando equipo MacBook Pro. Video: Iván Estuardo.
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